En la rutina diaria, encontrar momentos especiales para conectar con nuestros hijos puede ser todo un desafío. Sin embargo, una actividad que puede transformar un día común en una experiencia extraordinaria es cocinar juntos. No solo es una oportunidad para divertirse, sino que también es una manera maravillosa de enseñar habilidades importantes, promover hábitos alimenticios saludables y crear recuerdos duraderos. Usualmente lo hago con Benja y Leti y lo disfrutamos muchísimo asi como tambien nos damos cuenta que juntos transformamos.
Acá les dejo un par de aprendizajes que hacen de esta una actividad invaluable y una receta que amamos: Torta de Banano, asi que manos a la obra y nos cuentan como les sale.
1. Fortalece los Vínculos Familiares
Cocinar juntos fomenta la comunicación y el trabajo en equipo. Los niños se sienten valorados cuando se les incluye en tareas importantes y se les da la oportunidad de contribuir.
2. Desarrolla Habilidades Prácticas
Desde medir ingredientes hasta seguir instrucciones, los niños desarrollan habilidades motoras finas y aprenden conceptos matemáticos y científicos básicos. Asi empiezan a aprender fracciones e incluso como mezclando diferentes ingredientes consigues algo delicioso.
3. Promueve Hábitos Alimenticios Saludables
Al involucrar a los niños en la preparación de alimentos, es más probable que se interesen por probar y disfrutar comidas saludables.
4. Fomenta la Creatividad
Cocinar permite a los niños experimentar con sabores y texturas, fomentando su creatividad y curiosidad culinaria.
5. Enseña Responsabilidad y Organización
Participar en la cocina ayuda a los niños a entender la importancia de la limpieza, la organización y la preparación, habilidades esenciales para la vida, porque siempre que cocinamos tambien nos encargamos de dejar limpia la cocina.
6. Crea Recuerdos Inolvidables
Las experiencias compartidas en la cocina se convierten en recuerdos preciados que los niños llevarán consigo toda la vida.
Torta de Banano
Ingredientes
– 1 ½ tazas de harina de avena (puedes licuar avena regular hasta que quede en polvo)
– 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
– 1 pizca de sal
– ¾ taza de miel de agave, miel de abeja o azúcar de coco (puedes usar ½ taza si prefieres menos dulce)
– 2 huevos
– 100 gramos de mantequilla suavizada (a temperatura ambiente)
– 1 taza de yogur natural o griego
– 2 bananos maduros macerados
– 1 ¼ tazas de pepitas de marañón, pecanas o nueces (lo que tengas)
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
Instrucciones:
1. Precalienta el horno a 350°F (175°C).
2. Preparar los Ingredientes Secos en un bol. Ideal cernir la harina de avena, el bicarbonato de sodio y la sal.
3. Mezclar los Ingredientes Húmedos: En otro bol, batir los huevos con la miel y la mantequilla hasta que la mezcla quede esponjosa. Añadir el yogur, los bananos macerados, las nueces y el extracto de vainilla, mezclando bien.
4. Combinar y Mezclar: Incorpora los ingredientes secos a la mezcla húmeda. Mezcla suavemente con una espátula, utilizando movimientos envolventes para no sobre amasar.
5. Preparar el Molde: Engrasa y enharina un molde para hornear. Vierte la mezcla en el molde preparado.
6. Hornear: Hornea por 45 minutos a 1 hora, o hasta que un cuchillo insertado en el centro salga limpio.
Listo! Deja enfriar la torta antes de desmoldar y disfruta de esta deliciosa y saludable torta de banano con tu familia!
“Cocinar con tus hijos no sólo convierte un día ordinario en algo extraordinario, sino que también nutre sus corazones y mentes. Con cada receta, estás creando memorias que quedaran guardadas en sus recuerdos por siempre. Creanme así lo hacia mi mamá cuando yo era chiquita y hoy es algo que no falta en una tarde después del colegio”